REDACCIÓN
La escalada de violencia que desde hace meses se vive en el municipio de Huajicori, derivada de la disputa territorial entre grupos del crimen organizado, ya comenzó a impactar directamente a Acaponeta, un municipio clave por su actividad comercial y su ubicación como paso obligado hacia la sierra.
Así lo reconoció el presidente municipal de Acaponeta, Manuel Salcedo, quien advirtió que los recientes hechos violentos registrados en su municipio no son aislados, sino una consecuencia directa del conflicto que se mantiene en Huajicori. Explicó que Acaponeta se ha convertido en un punto estratégico para el abastecimiento de alimentos, transporte, recursos y tránsito de personas hacia la zona serrana.
El alcalde señaló que esta situación genera un clima de tensión, ya que comerciantes, transportistas, ganaderos, maestros y empresarios que tienen actividades en Huajicori utilizan Acaponeta como base, lo que provoca que algunos ciudadanos sean señalados o confundidos como colaboradores de uno u otro grupo, desatando represalias, privaciones de la libertad y ataques violentos.
Ante este escenario, Salcedo afirmó que el municipio ha reforzado medidas preventivas, entre ellas la recomendación a la población de evitar circular de noche y la suspensión de la venta de alcohol a partir de la una de la mañana, al considerar que en esas horas el riesgo se incrementa de manera significativa.
Aunque reconoció la presencia de fuerzas estatales y federales, el edil admitió que el reto es evitar que la violencia se desborde y se normalice en la vida cotidiana. “Acaponeta no está en guerra, pero ya resiente los efectos de lo que ocurre en Huajicori”, expresó.