REDACCIÓN
El Instituto para la Mujer Nayarita ha detectado una situación alarmante: adultos mayores completamente abandonados por sus familias, víctimas de maltrato, despojo y hasta robo de sus pensiones. En muchos casos, los propios hijos o nietos no solo los rechazan, sino que también les retiran sus tarjetas del Bienestar para gastar ese dinero en adicciones o placeres personales.
“Los insultan, los desprecian y les quitan su ‘tarjetita Bienestar” denunció Margarita Morán Flores, quien informó que se han atendido varios casos de adultos mayores en condiciones de abandono extremo. Algunos terminan siendo cobijados por instituciones como el albergue Juan de Celayeta; en otros, se intenta localizar a familiares responsables.
Uno de los casos más crudos fue el de un anciano cuyo hermano, que radica en Tijuana, tuvo que viajar hasta Nayarit para rescatarlo tras enterarse de la gravedad de su situación. “No sabía que su hermano estaba postrado y completamente solo”, relató Morán Flores.
Ante estos hechos, se cancelan las tarjetas Bienestar robadas y se tramitan nuevas, además de solicitar a los nuevos responsables que extremen cuidado, ya que muchos adultos mayores no pueden moverse ni acudir por su pensión.
Las autoridades hacen un llamado urgente a la conciencia familiar y a denunciar este tipo de abusos que, aunque silenciosos, son cada vez más frecuentes.